domingo, agosto 03, 2008

No sé decirte adiós

No sé, ni quiero saber, decirte adiós. Cada día me veo más torpe en tus conversaciones, en las nuestras. Siempre me callo algo, o digo algo que no debía...



PROBLEMAS DE GEOGRAFÍA PERSONAL

Nunca sé despedirme de ti, siempre me quedo
con el frío de alguna palabra que no he dicho,
con un malentendido que temer,
ese hueco de torpe inexistencia
que a veces, gota a gota, se convierte
en desesperación.
Nunca se despedirme de ti, porque no soy
el viajero que cruza por la gente,
el que va de aeropuerto en aeropuerto
o el que mira los coches, en dirección contraria,
corriendo a la ciudad
en la que acabas de quedarte.
Nunca sé despedirme, porque soy
un ciego que tantea por el túnel
de tu mano y tus labios cuando dicen adiós,
un ciego que tropieza con los malentendidos
y con esas palabras
que no saben pronunciar.
Extrañado de amor,
nunca puedo alejarme de todo lo que eres.
En un hueco de torpe inexistencia,
me voy de mí
camino a la nada.

Luis García Montero

2 Susurros:

Anonymous Anónimo said...

Esta mañana me levanté con ese poema mariposeando a mi alrededor. Pensé que con la ducha se iría. Luego creí que el café le espantaría. Más tarde supuse que el trabajo le desanimaría.
En vano.
El poema ha seguido ahí.
La cosa es que no lo recordaba entero, de modo que he venido a google a buscarle.
Y he encontrado este blog.
Y he revoloteado por aqui.
Y me ha encantado.
Gracias.

Cati.

2:07 p. m.  
Blogger Yaiza said...

¿Por qué temer lo que no nos atrevemos a hacer? Es malo para el alma quedarse con palabras que pertenecen a otros.

No me gusta decir adiós si no es lo que siento realmente.

Espero pasar por aquí más y ser de las que no necesito mirar el manual de instrucciones.

7:00 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home