domingo, abril 16, 2006

De todo un poco



1)Pues sí... de todo un poco. Porque al final quedé con ella. Y la verdad es que al principio la cosa más o menos bien. Según avanzó la tarde la cosa empeoró. Para después a última hora y tras hacer un poco el payaso conseguir que se riese un poco. No sé que pasará... En principio esta semana la va a tomar de reflexión, tratando de no vernos y hablar poco o nada por teléfono. Ahora misma la cosa está como la foto: congelada

2)Alguno lo sabreis... pero bueno, por si acaso. Tengo otro blog donde escribo de vez en cuando algún poema o cuentecillo o lo que sea que me de la gana en ese momento. No lo digo para que me digais si lo hago bien o mal. Solo que lo publico porque quiero compartirlo con vosotros.

3)Me apetece poneros esta canción. El grupo tiene fama de moñas... pero la verdad es que a mí me gustan bastante. (Y no... los colores no son casualidad.)

Muñeca de trapo

Como esos cuadros que aún están por colgar,
Como el mantel de la cena de ayer,
Siempre esperando que te diga algo más,
Y mis sentidas palabras no quieren volar.


Lo nunca dicho se disuelve en un té,
Como el infiel dice nunca lo haré,
Siento que estoy en una cárcel de amor,
Me olvidarás si no firmo mi declaración.


Me abrazaría al diablo sin dudar
Por ver tu cara al escucharme hablar,
Eres todo lo que más quiero,
Pero te pierdo en mis silencios,
Mis ojos son dos cruces negras
Que no han hablado nunca claro,
Mi corazón lleno de pena,
Y yo una muñeca de trapo.


Cada silencio es una nube que va,
Detrás de mí sin parar de llorar,
Quiero contarte lo que siento por ti,
Y que me escuche hablar la luna de Enero
mirándote a ti.


Me abrazaría al diablo sin dudar
Por ver tu cara al escucharme hablar,
Eres todo lo que más quiero,
Pero te pierdo en mis silencios,
Mis ojos son dos cruces negras,
Que no han hablado nunca claro,
Mi corazón lleno de pena,
Y yo una muñeca de trapo.


No tengo miedo al fuego eterno,
Tampoco a sus cuentos amargos,
Pero el silencio es algo frío,
Y mis inviernos son muy largos,
Y a tu regreso estaré lejos,
Entre los versos de algún tango,
Porque este corazón sincero,
Murió en su muñeca de trapo.