miércoles, noviembre 30, 2005

Obligaciones


Escribo esto después de una siesta. Esa que necesitaba ayer, y que, por incumplida me he tomado hoy. Saltandome una clase. Es verdad... pero tengo los apuntes y un puente muy largo para estudiarla.
Ayer fue un día bastante movido. Para variar, no tuve tiempo de casi nada. LLegué a casa de la Universidad, fuí a dar clases a un niño pijo (¿cómo se puede acumular tanta tontería en tan pocos años?) y desde allí a mis labores con La Familia.
La cosa fué un éxito (enhorabuena GM y Rizos). Eso sí, hizo que llegase a casa más tarde de lo habitual (que no suele ser muy pronto, para alguien que se despierta a las 7:00).
Conversé con ella. Se agobia demasiado con las clases. ¿Qué haría si llevase nuestro ritmo de vida? Simplemente no sería capaz. También es verdad que ella aprueba todas. Pero la carrera no lo es todo.

Hoy también toca ver a La Familia. Compartiremos conclusiones de ayer.

1 Susurros:

Anonymous Anónimo said...

hola rubito,

qué tal un paseo por madrid en diciembre o enero?

encontrarás tiempo?

espero que las obligaciones no te hagan perder de vista en ningún momento el cielo (es muy triste terminar el día y darse cuenta de que uno no ha levantado la vista del suelo)
las cosas importantes son las únicas merecedoras de nuestro tiempo (y, a veces, hay que pararse y responderse qué es lo que realmente importa)

un beso.
R.

6:23 p. m.  

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